En España disponemos de un buen número de instalaciones dedicadas a la producción de aceites de oliva de diferente elaboración y calidad. Almazaras, orujeras, refinerías, envasadoras, operadores, laboratorios y entamadoras forman un extenso tejido industrial que se expande por casi todo el territorio nacional, siendo su mayor exponente Andalucía, y sobre todo, Jaén .
Hoy, queremos hablaros de la mayor infraestructura productora, las famosas almazaras. Proveniente del árabe hispánico “alma’sára” y éste del árabe clásico “ma’sarah”, las almazaras suelen concentrarse en la provincia de Jaén (hasta un 40%) y su tamaño depende siempre de la cantidad de aceite producida por campaña.
Las almazaras modernas se componen, habitualmente, de tres espacios de trabajo diferenciados según la fase de producción, que son:
- Patio de Recepción o zona donde la aceituna se recibe, limpia (limpiadora), lava (lavadora), pesa (pesadora) y almacena.
- Nave de elaboración, constituida por un espacio cerrado donde la aceituna se muele, se bate y se limpia de aguas.
- Bodega, espacio cerrado donde se almacena el aceite en depósitos.
- Tradicional: constituye el 14% del número total de almazaras pero producen solo el 1,16% de la producción total, y se encuentran en fase de desaparición.
- De 3 fases: han sustituido el sistema de molienda mediante molinos mecánicos. La masa una vez obtenidas es calentada y batida en termobatidoras para facilitar la extracción de aceite, realizada posteriormente mediante centrifugación. Se obtienen como resultado aceite de oliva virgen, orujo y alpechín Son el 9% y producen el 3,18% de la producción española de aceite de oliva virgen.
- De 2 fases: el sistema más moderno que únicamente produce aceite y alperujo. Son el 72% y obtienen el 90,10% del total producido.
- Mixtos: utilizan dos o más de los sistemas anteriores. Constituyen el 5% y les corresponde el 5,55 de la producción nacional.
No hay comentarios:
Publicar un comentario